La muestra del artista shipibo Shoyan Shëca (San Francisco, Ucayali, 1968), conocido también como Roldán Pinedo (nombre oficial), presenta pinturas de la fauna de su región, celebrando 25 años desde que presentó por primera vez en Lima una serie de retratos de animales, convocado por el historiador Pablo Macera.

En esta exposición se presenta junto a su hijo, Inin Metsa (Harry Pinedo), artista invitado, con quien ha expuesto en el museo Quai Branly (Voyages chamaniques, París, 2024), la feria Pinta-Parc (Lo que los ojos no ven, 2020) y Matadero-Madrid (Amazonías, 2019), así como en galerías y ferias de varios países.​

​Shoyan Shëca o Roldán Pinedo es un artista que reivindica su pertenencia al pueblo Shipibo, cuyos conocimientos están profundamente conectados a una visión espiritual de la naturaleza. El artista comenta: ​“Al dueño de los animales, el chullachaqui, uno mismo lo puede escuchar cuando entra en el monte. No debemos molestarlo matando sus animales por gusto. Él los esconde. ​Cerca a Pucallpa ya no hay muchos animales. Lo que se encuentra, más adentro, es la huangana, mono negro, ronsoco, venado, sajino, garza con cuello colorado, guacamayo, paujil, motelo, lagarto. Ya casi no se encuentra tigre ni puma, los madereros los han hecho correr”.

Inin Metsa (Pucallpa, 1988) o Harry Pinedo Valera llegó a Lima a los siete años, pero ha sido su lugar de origen el determinante en su pintura. Ha desarrollado su oficio junto a sus padres, con quienes comparte sus temas.  Ha ido construyendo un estilo propio, con una interpretación más libre y lúdica de la mitología de su comunidad.  Los shipibos tienen aliados dentro de la naturaleza para evitar que sea depredada;  espíritus guardianes que protegen a las especies de ser consumidas en exceso y, a la vez, son generosos con quienes las respetan.